lunes, 30 de junio de 2008

Polos de limón

Cuando yo tenía seis años, mis padres me anunciaron la llegada de un hermano. A mí me pareció una buena idea, siempre y cuando fuera una niña y no uno de esos niños brutos que nos pegaban en el cole. Así que cada cierto tiempo le suplicaba a mi madre lloriqueando que el bebé fuera una niña.

En aquel entonces no se hacían ecografías, y el sexo del bebé era una sorpresa hasta el parto. Es por eso que mi madre, con cara de preocupación, me repetía una y mil veces que tendríamos que querer igual a mi hermano fuera niño o fuera niña. Yo asentía pero insistía: - "Sí, pero por favor, que sea una niña, y que se llame Carolina" - (Carolina era una de las niñas de mi clase de parvulitos que me parecía muy guapa).

Para tranquilidad de mis padres y regocijo mío, el bebé fue una niña, y se llamó Carolina. Una niña pequeña, de piel clara y cabello oscuro, que creció entre risas por mi casa. Todas las noches se acostaba con su ejército de Gusiluces (de plástico, que había que cargar acercándolos a una bombilla), y con el deseo de todos de que durmiera bien, soñara con los angelitos y (lo más importante de todo), con un polo de limón (sus favoritos).

Juntas crecimos rompiendo mesas de salón y barómetros de pared. Los veranos discutíamos por la película que ver después de comer en el vídeo Beta de mi padre. Mi hermana es la culpable de que yo haya visto hasta la saciedad "La bruja novata" y todos los capítulos de "Dragones y Mazmorras". Pero no puedo culparla más, no en vano aguantó estoicamente mis pesadillas nocturnas de sonámbula con todo tipo de bichos durante todos los años que compartimos habitación.


Las cosas importantes en la vida pasan de repente, sin que te des cuenta, y así un buen día apareció Sergio en la vida de mi hermana.
Sergio, que es fiel, que es cariñoso. Sergio, que es paciente, que es generoso. Sergio, que para mí tiene la mejor de todas las cualidades: quiere a mi hermana tanto como ella lo quiere a él.

Este sábado mi hermana y Sergio se casan. Hace ya 27 años que yo deseaba que aquel bebé fuera una niña (¡!). Lo que hoy deseo es que Carol y Sergio tengan una muy larga y muy feliz vida juntos. Que todos los días de su vida (tal y como les recordará el cura), se amen y se respeten.



Y que todas las noches, sueñen con polos de limón.


10 comentarios:

Anónimo dijo...

Soy Anita (Camping)
Sin palabras...
Tengo los piel de gallina y la lágrima a punto...

Enhorabuena!!

bss

Pi dijo...

Amiga
No se como estará tu hermana pero yo tengo la lagrimilla fuera.
Por cierto Carolina:
Enhorabuena! Espero que seas tan feliz como tu hermana desea.

Penélope Glamour dijo...

Ya sé que Bea no quiere que ocurra ;-) pero si alguna vez me caso, Sonia tú serás mi cura, me llegan mucho más tus palabras, tanto que también tengo la lagrimita fuera.
Espero que sea un día muy feliz para tu hermana y que tú lo disfrutes con ella.

El blanco no pinta dijo...

¡Anita! ¡Qué sorpresa y qué alegría saber de tí! Muchas gracias. ¿Nos vemos el sábado?

El blanco no pinta dijo...

Hola Pi, guapetona. Creo que mi hermana está ahora a otras cosas y otras movidas, pero le haré llegar tus buenos deseos. Muchos besos.

El blanco no pinta dijo...

Penélope, si tú te casas, yo leo en tu boda y lo que haga falta...
Muchas gracias por tus buenos deseos.
Besos, amiga.

Anónimo dijo...

Hola, soy Raquel (la hermana de Anita (Camping)).
Hay que darle la enhorabuena a Carol por dos motivos, porque se casa el sábado y por tener una hermana que la quiere tanto...

Un beso y pasároslo muy requetebien.

Bitrix dijo...

¿Y ya no vas a leer esto en la boda? Pues es una pena porque esta genial y seguro que a todo el mundo le encantaba. En cualquier caso que lo paséis fenomenal.

Besos.

Por cierto, si la parte contratante de Pénelope Glamour lee su comentario respecto a que yo no quiero que se casen espero que me deje explicarme antes de matarme ;-)

Anónimo dijo...

Hola, soy la madre de Sonia y Carilina,y quiero decir que me siento muy orgullosa de mis hijos y especialmente de Sonia (es una persona muy especial)

Kaida dijo...

Señora, su hija se merece un monumento, ya se lo digo yo, tiene que hacerse escritora, tiene toooodo lo que hay que tener.

Muchas felicidades por esa boda!!!

Y se me olvidaba, muy guapas en esa foto, sniff!, sacas mi lado tierno.

Un besazo desde Tres Cantos!!