domingo, 15 de abril de 2007

Los premios Darwin

Han estrenado en España este fin de semana la película 'Muertes de risa'. La crítica no la pone demasiado bien (si alguno habéis ido a verla podréis confirmarlo o rebatirlo), pero lo más interesante desde mi punto de vista, es que el argumento gira alrededor de los Darwin Awards, que son premios póstumos que se entregan a aquellos que mueren de forma más estúpida. Se llaman premios Darwin porque sus creadores creen que hay gente que benefician a la humanidad al librarla de su herencia genética (selección natural, pero en lugar de por el físico, por las estupideces que se hagan en la vida).

Estos premios se llevan concediendo desde 1994, tienen una página web donde aparecen los que han sido concedidos hasta el momento, denuncian aquellos que en realidad son leyendas urbanas, e incluso venden libros.

A la gente se le permite votar cuál es la mejor muerte de todas, y mantienen un ranking de las mejores, entre las que se encuentran éstas:

  • Un paciente murió quemado al encender un cigarrillo en Reino Unido, a pesar de que le habían advertido de que la crema de parafina que le habían aplicado para sus problemas de piel era altamente inflamable (2006).
  • Un chico de Michigan de 19 años, pensando que su vecino le había robado una de sus botellas de alcohol, decidió que se iba a vengar haciéndose él mismo cortes en el pecho con un cuchillo y denunciando en comisaría que le había agredido su vecino. Pues bien, se hizo dos cortes, el segundo de los cuales le cortó el ventrículo izquierdo, y murió en 2 minutos. La autopsia demostró que los cortes habían sido autoinflingidos, y resulta que el vecino ni siquiera se encontraba en casa, con lo cual hubiera sido imposible que lo atacara (2005).
  • Dos universitarios de Taiwan, enamorados de la misma chica, decidieron que cada uno iba a enfrentarse frontalmente con su moto contra el otro, y el primero que se apartase, perdería el derecho a cortejar a la chica. Ninguno se apartó, y el choque, que se produjo a unos 80 Km/h mató a los dos. Posteriormente la chica dijo que ella no estaba interesada en ninguno de ellos (2004).
  • Un croata murió mientras trataba de abrir una granada de mano con una motosierra. Quería hacer fuegos artificiales para la fiesta de año nuevo (2002).
  • Un terrorista iraquí no puso sellos suficientes en una carta bomba, y le fue devuelta marcada como 'Devuelta al remitente'. Abrió la carta y explotó (2000). Este mismo año, dos activistas por los derechos de los animales soltaron unos cerdos que iban a ser sacrificados y murieron aplastados por los propios cerdos.

1 comentarios:

Naglas Morfol dijo...

Podeis adivinar la risotada que me he echado al leer esta noticia....¡¡Yo quiero ir a la entrega de estos premios!!......